El botiquín de primeros auxilios, fundamental en hogares con niños
El botiquín de primos auxilios es uno de los elementos del hogar que siempre debe tenerse al día, completo y con los medicamentos y accesorios sanitarios necesarios que nos ayuden a atender cualquier urgencia. Este pequeño botiquín es especialmente importante en hogares con niños, ya que son más proclives a los accidentes domésticos y a ser más revoltosos por naturaleza.
En caso de enfermedades:
En caso de que nuestros hijos padezcan alguna enfermedad o problema de salud, tanto puntual como crónica, es importante llevar las cuenta de las tomas de medicamentos, y estar preparado para cualquier imprevisto que pueda surgir.
En estos casos, lo mejor es que todas las personas que se encarguen de cuidar al niño tengan conocimiento de qué debe tomar y cuando. Colocar una nota explicativa junto a los medicamentos en su mochila de escuela, en la bolsa de las tareas extraescolares o en la guantera del coche son prácticas muy recomendables.
¿Qué debe contener el botiquín?
Para atender a niños pequeños en casa antes de visitar a un médico, los artículos imprescindibles de un botiquín son:
-Termómetro.
-Analgésicos: para los niños se comercializan en forma de jarabe, con mecanismos de apertura complejos.
-Antihistamínicos: medicinas para la alergia.
-Medicinas para aliviar la tos.
-Lociones para calmar las irritaciones de la piel.
-Tiritas de diferentes tamaños.
-Desinfectantes para heridas como el agua oxigenada o el yodo.
-Gasas estériles. No cures las heridas con algodón.
-Vendas y esparadrapo.
-Pomadas para quemaduras.
-Repelente de insectos.
-Suero fisiológico imprescindible para hacer lavados nasales y oculares.
-Tijeras y pinzas.
Recomendaciones básicas:
Aunque este botiquín sirva como opción auxiliar en caso de emergencia, administrar medicaciones a los niños siempre debe realizarse por la recomendación profesional del pediatra.
Tampoco es conveniente saltarse los horarios prescritos o acotar los tiempos de tratamiento dictados por el médico.
En caso de detectar síntomas extraños tras la toma de un medicamento, los padres deberán acudir rápidamente al pediatra: ningún fármaco está exento de efectos secundarios.
Recuerda que el botiquín familiar de primeros auxilios debe estar fuera del alcance de los niños, ser fácilmente transportable, y no debe contener medicamentos caducados. Es más, se recomienda colocarlo en lugar fresco y seco, en una caja o armario alto cerrado con llave.
Fuente: www.seguroscatalanaoccidente.com